L’Union europea finalmente ha encontrado un acuerdo el viernes 8 de diciembre sobre la implementación de regulaciones para la inteligencia artificial. El objetivo es apoyar la innovación en Europa mientras se limitan los riesgos mediante reglas estrictas. La Unión Europea ha acordado una legislación sin precedentes a nivel mundial después de tres días de negociaciones intensas entre los Estados miembros y el Parlamento Europeo. Los co-legisladores de la UE han llegado a un acuerdo político sobre un texto destinado a promover la innovación en Europa mientras se limitan los abusos potenciales de estas tecnologías muy avanzadas. La UE se convierte así en el primer continente en establecer reglas claras para el uso de la IA, como destacó el comisionado europeo que impulsó el proyecto presentado en abril de 2021. El último ciclo de negociaciones, que comenzó el miércoles por la tarde, duró casi 35 horas. El proceso se vio interrumpido a finales del año pasado por la aparición del generador de texto de OpenAI, capaz de redactar ensayos, poemas o traducciones en cuestión de segundos. Este sistema, así como aquellos capaces de crear sonidos o imágenes, ha revelado al público en general el inmenso potencial de la IA.
Autonomía estratégica e innovación
La difusión en redes sociales de videos deepfake casi indiscernibles de la realidad ha suscitado preocupaciones sobre la manipulación y la desinformación. Los Estados miembros temían que una regulación excesiva sofocara a sus campeones emergentes como Aleph Alpha en Alemania y Mistal AI en Francia, haciendo que los costos de desarrollo fueran prohibitivos. «Analizaremos cuidadosamente el compromiso de hoy y nos aseguraremos en las próximas semanas de que preserve la capacidad de Europa para desarrollar sus propias tecnologías de IA y mantenga su autonomía estratégica», respondió el ministro francés de digitalización, Jean-Noël Barrot.
«La rapidez parece haber prevalecido sobre la calidad, con consecuencias potencialmente desastrosas para la economía europea», declaró Daniel Friedlaender, responsable de Europa en el CCIA (Computer & Communications Industry Association), uno de sus principales lobbies. También deben asegurarse de que los sonidos, imágenes y textos producidos por los sistemas de IA sean correctamente identificados como artificiales.
Reglas para sistemas de alto riesgo
En el corazón del proyecto hay una lista de reglas impuestas únicamente a los sistemas considerados de alto riesgo, principalmente aquellos utilizados en áreas sensibles como infraestructuras críticas, educación, recursos humanos y represión.
Control humano y requisitos técnicos
Estos sistemas estarán sujetos a una serie de obligaciones, incluida la exigencia de supervisión humana sobre la máquina, la elaboración de documentación técnica y la implementación de un sistema de gestión de riesgos. Estas regulaciones se aplicarán a las aplicaciones que vayan en contra de los valores europeos, como los sistemas de vigilancia masiva utilizados en China o la identificación biométrica a distancia de individuos en espacios públicos para evitar la vigilancia masiva de poblaciones. Sin embargo, los Estados miembros han obtenido exenciones para ciertas misiones represivas sobre este último punto.
Un acuerdo histórico tras negociaciones maratónicas
Tras tres días de debates en trilogo, la Unión ha llegado a un texto que prevé la regulación de la inteligencia artificial. Publicado el 8 de diciembre de 2023 a las 9:45, este acuerdo es el resultado de numerosas horas de negociación entre los diferentes actores europeos. El objetivo: finalizar un texto histórico destinado a regular la inteligencia artificial. «La UE se ha convertido en el primer continente en establecer reglas claras para el uso de la IA», declaró Thierry Breton, que inició el proyecto presentado en abril de 2021.
Con esta regulación sin precedentes, Europa se posiciona como pionera en la gobernanza de la inteligencia artificial. El camino está ahora trazado para apoyar la innovación mientras se limitan los abusos posibles relacionados con estas tecnologías en constante evolución.